Actores como Leonardo DiCaprio, Ben Affleck o Jason Segel se han convetido en los modelos perfectos del «Dad bod», fofisano, o gordiflaco, como le llaman en algunos países.

Por: Revista ES

¿Qué tal si le decimos que el nuevo modelo de hombre sexy es el hombre “con panza cervecera”? Quizás piense que es una broma de mal gusto que le daríamos a ese amigo que por más que juega fútbol los fines de semana no logra deshacerse de la panza.

Sin embargo, no es una broma, sino una nueva tendencia estética llamada «Dad bod» o “Cuerpo de Papi”, que equivale a la reivindicación femenina de la ‘belleza real’, pero en los hombres.

La tendencia defiende al típico hombre que practica ejercicio ocasional, pero que no se priva del buen comer; el hombre que no persigue el idealismo de los abdómenes planos y cuadriculados, sino es feliz con su belleza natural y acepta con orgullo la famosa pancita cervecera del hombre real.

Actores como Leonardo DiCaprio, Ben Affleck o Jason Segel se han convetido en los modelos perfectos del «Dad bod», fofisano, o gordiflaco, como le llaman en algunos países.

“Aunque el fofisano ha existido toda la vida, su éxito actual se le debe a Mackenzie Pearson, una estudiante de la Universidad de Clemson. La joven publicó un artículo en el portal The Odissey de la universidad donde defendía que el «cuerpo de papi» es el que realmente atrae a las mujeres. La chica apuntaba que la población femenina no siente deseo por los hombres obsesionados con su musculatura y que viven por y para el gimnasio, sino que atrae el hombre joven y suficientemente sano y de cuerpo ligeramente fofo, que no es gordo, ya que resultan más naturales y humanos”, explican algunos diarios españoles.

“Dad bod” sería un hombre entre activo y sedentario, que antepone unas cervezas improvisadas afterwork a esa ensalada de lechuga y aguacate que tenía prevista como cena. Que no se arrepiente de pedir helado de postre, si el lunes sale a correr cinco kilómetros. Un chico al que más que conjugar dieta y ejercicio, le basta “conjugar” una pachanga.  Sí, podría tratarse de tu padre sentado frente al ordenador haciendo la declaración de la renta, pero también de gran parte de los chicos que te rodean”, explica la bloguera que inventó el termino.

El concepto se puso de moda en Estados Unidos y Europa y ahora los usuarios de las redes sociales suben sus fotos mostrando sus panzas y brazos que aunque no son nada perfectos, si son naturales.

Algunos expertos señalan que la tendencia no debería ser algo nuevo, sino una evidencia de que vivimos una época de “idolatría de la normalidad”, una señal positiva para romper estereotipos, pero que no debería convertirse en una escusa para descuidar la salud.

Así que, tranquilos varones, la panza cervecera no debería seguir siendo un complejo, pues al parecer está cobrando vida el viejo dicho de los abuelos: «Un hombre sin panza es como una noche sin estrellas».