Recientemente, se aprobó para Costa Rica, una nueva e innovadora alternativa terapéutica para tratar la psoriasis. Guselkumab, un tratamiento para pacientes adultos que padecen psoriasis en placa, moderada a severa, y que son candidatos a terapia sistémica o a fototerapia. Se trata del primer medicamento en su clase que bloquea selectivamente la interleucina-23 (IL-23), un mensajero intracelular que juega un rol clave en la aparición y desarrollo de la psoriasis en placa.
El objetivo del tratamiento es lograr el aclaramiento de las lesiones de la piel. Para evaluar su eficacia se usan medidas clínicas, una de ellas conocida como PASI, que traducido al lenguaje actual equivale al Índice de Severidad y Área de Psoriasis (PASI, por sus siglas en inglés).
En la fase de estudios clínicos, guselkumab demostró resultados rápidos y duraderos: a las 16 semanas, siete de cada diez pacientes que usaron este tratamiento biológico (medicamentos diseñados con técnicas de biología molecular) alcanzaron al menos un 90% de aclaramiento de la piel de lesiones de psoriasis. Además de mejorar otros síntomas, al continuar en tratamiento se mantiene la respuesta en un 82% de ellos a lo largo del tiempo.
Una característica muy importante es, no solo la rapidez de acción, sino la eficacia sostenida a lo largo del tiempo, así como su seguridad.
La psoriasis es un trastorno crónico inflamatorio, autoinmune, que ocasiona una sobreproducción de células de la piel generando lesiones escamosas engrosadas e inflamadas, con diferentes formas clínicas de presentación. Existen diferentes tipos de psoriasis, siendo la más común la psoriasis en placas, que afecta alrededor del 80% de los pacientes. Su principal característica es la aparición de placas enrojecidas de forma redondeada, ovalada o irregular y cubiertas por escamas plateadas.
Estas placas suelen producir picazón intensa, puede tener tamaño variable y se ubican generalmente en el cuero cabelludo, el tronco, las orejas, los glúteos y región lumbar, genitales, uñas de las manos y pies, plantas de los pies, con predilección por las superficies extensoras de los codos y las rodillas.
La Psoriasis causa un impacto negativo sobre la calidad de vida de los pacientes, no es transmisible, pero el principal impacto es que provoca estigmatización. A pesar de que actualmente la psoriasis no tiene cura, existe una nueva opción terapéutica que permite un excelente control de la enfermedad.
“Aunque existe una gran variedad de tratamientos disponibles para lograr el aclaramiento de la piel, es una meta que muchas veces no se alcanza. Hasta el momento, la psoriasis no tiene cura, por ello, es tan importante contar con opciones innovadoras que demuestren eficacia en el corto y largo plazo. El tratamiento con la molécula guselkumab, mejora significativamente la calidad de vida del paciente con psoriasis, permitiéndole tener una vida más activa, social y plena”, finalizó Benjamín Hidalgo-Matlock, dermatólogo.