Nunca almuerces en tu escritorio ¿Sabes por qué?

Un 14 % come en su escritorio de trabajo

Por El Salvador 

Una buena alimentación es fundamental para conseguir un óptimo rendimiento laboral, tanto física como intelectualmente.

Por eso, conviene seguir una serie de hábitos alimentarios en el trabajo que no solo implican mantener una dieta equilibrada, sino que dan importancia al hecho de respetar siempre la pausa para la comida, moverse durante esa hora, cambiar de espacio o disponer de unos lugares habilitados para comer, entre otros.

Estudios revelan que el 42 % de los trabajadores afirma comer fuera de la oficina (ya sea en restaurantes o en casa). Del resto, el 31 % come en un comedor o cocina habilitado para ese fin, mientras que un 12 % comparte espacios destinados a comer en grupo (salas de reunión, mesas de grupo, despachos, etc.).

Por último, un 14 % come en su escritorio de trabajo. Es un porcentaje reducido pero que conviene subrayar, ya que se trata de una práctica que a la larga puede generar problemas de salud.

El sitio entornosaludable.com comparte cinco motivos por los que obligarse a abandonar, por un rato, su mesa de trabajo y comer en otro entorno.

Mejorará el bienestar laboral y personal, cuerpo y mente necesitan descansar: alejarse un poco de la pantalla de la computadora ayudará a mantener el bienestar y la calidad de la productividad.

Conviene coordinar bien los tiempos destinados a trabajar, descansar y alimentarse para no saturarse y empeorar el desempeño.

Estar pendiente de la pantalla induce a comer más: el acto de comer se vuelve automático, el placer de saborear el alimento se pierde, se reduce la sensación de saciedad y, como consecuencia, se ingieren más calorías.

También hay que cuidar la higiene en el puesto de trabajo: mantener el escritorio limpio y sin restos de comida ayudará a evitar posibles infecciones. Por eso conviene separar las zonas de trabajo y de comida. Los trabajadores también deben conocer la importancia de guardar los alimentos en el refrigerador u otros espacios alejados del escritorio.

Evite el sedentarismo laboral, salir a comer hace que se mueva y evita problemas de salud que se pueden derivar de la falta de ejercicio diario como la obesidad, el debilitamiento óseo, los dolores de espalda o las enfermedades cardiovasculares.

Procure las relaciones sociales, abandonar su mesa de trabajo hará que se relacione con sus compañeros y estimule su pensamiento. La exposición a otras personas, otros lugares y otras actividades lo lleva a tener nuevas ideas.

Trate de comer fuera por lo menos un día a la semana y a compartir ese momento. Refuerza los vínculos y mejora la percepción de la vida laboral.

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