Se ha detenido a pensar sobre cómo sería su vida si apagara el piloto automático por un rato y usara toda su concentración para lograr ser consciente de las experiencias que le da la vida, viviendo verdadera y plenamente, sin pensar en el pasado ni en el futuro, para conectarse y disfrutar la vida.
Un tiempo de atención plena que le dedique a su vida, aceptando las cosas que le pasan sin juzgar, estando plenamente presente hoy, aquí y ahora, le ayudará a tener una vida más tranquila, relajada, y sobre todo consciente de las maravillas que puede atraer si se dispons a hacer una pausa profunda y armonizar su cuerpo.
1. Cada mañana, antes de levantarte, identifique qué parte de su cuerpo necesita desperezarse especialmente. Disfrute ese momento de empezar el día. Inhale y exhale cuando estira en la cama.
2. Al lavarse las manos, conéctese con el agua sintiendo la textura del jabón y su fragancia. Haga una pausa para sentir el contacto de una mano con la otra, liberando cualquier tensión de sus dedos con un masaje bajo el agua.
3. Con las yemas de los dedos, presione haciendo pequeños circulitos en la zona de la frente y nuca, utilizando un gel hidratante durante un minuto. Esto activa la forma natural de librar tensiones.
4. Cuanto se sientas incómodo, puede tomar un minuto para elegir cómo responder sin apurarse, así no reacciona inesperadamente (cuente hasta 10).
5. Imagínese a los pensamientos como nubes. Usted eres el cielo que los contiene. Los pensamientos vienen, se manifiestan y se van.
6. Permítase NO hacer, a veces NO hacer es mejor que hacer algo que no quiere o no necesita.
7. Ponerse crema puede resultar un buen momento para escuchar a su cuerpo. Aprenda a escucharse a sí mismo: ¿Está cansado? ¿Necesita frenar?
8. ¿Después de cenar siente cansancio? Pruebe inhalar y exhalar 3 veces de manera consciente. Se sentirá renovado con algo tan simple como usar su respiración.
9. Fabrique momentos de silencio. Escuche el silencio entre dos sonidos. En este momento conéctese con su paz interior.