La capacitación desempeña un papel crucial en la lucha contra el síndrome del impostor.
Por Revista ES
En el competitivo mundo actual el síndrome del impostor es un fenómeno psicológico real, muchas personas experimentan la sensación persistente de ser fraudulentas, a pesar de evidencias de éxito y competencia. Podría definirse también como una inseguridad persistente pese a que los hechos demuestran lo contrario. La autopercepción negativa se puede hacer presente en varios aspectos de la vida, pero es en el profesional donde el término ha sido adoptado mayormente. Este obstáculo del crecimiento profesional nace de las dudas, ansiedad y autosabotaje.
La capacitación desempeña un papel crucial en la lucha contra el síndrome del impostor, esta proporciona a las personas aquellas habilidades y conocimientos necesarios para desempeñarse con confianza en sus roles. En el tema de idiomas, apenas el 5% de los mexicanos dominaba el inglés en 2015 -según cifras del IMCO-, la lengua más empleada en el mundo de los negocios.
Aunque la cifra puede ser engañosa cuando se tiene en consideración a aquellos aseguran no saberlo pero lo único que tienen es desconfianza por hablar un segundo idioma en público, para el 2021, México se ubicó en la posición número 92 entre los 112 países que participaron en un estudio realizado para medir el Profiency en la lengua.
Al adquirir y reforzar constantemente habilidades, los profesionales pueden validar su valía objetivamente, contrarrestando las creencias autodestructivas asociadas con el síndrome. Además, la formación continua fomenta un sentido de logro y crecimiento, fortaleciendo la autoestima y proporcionando las herramientas necesarias para superar continuamente los desafíos laborales con eficacia.
Desde Dexty, training center dedicado a la práctica de inglés, comparten algunos tips para enfrentar con éxito el síndrome del impostor y evolucionar tu práctica del idioma para seguir creciendo profesionalmente, que el no hablar inglés deje de ser un obstáculo:
1. Reconoce tus logros: haz una lista de tus éxitos y habilidades en inglés. Recordar tus logros te ayudará a contrarrestar pensamientos negativos y al mismo tiempo apoya la ubicación de espacios de nuevos aprendizajes.
2. Habla con colegas: comparte tus experiencias con hablantes nativos o compañeros de aprendizaje. El poder practicar con temas y vocabulario que es necesario y se ocupa en el día a día de una profesión es importante y puede marcar la diferencia.
“No es lo mismo una conversación casual sobre el clima o lo que hiciste el fin de semana que tener una charla para conseguir acuerdos comerciales o una venta”, comparte Elizabeth Bulas, CEO y cofundadora de Dexty. “Contar con un espacio de práctica entre colegas suma a la confianza y al desenvolvimiento en un segundo idioma”.
3. Retroalimentación positiva: puede fortalecer tu confianza y ayudar a mejorar en las áreas en las que es necesario. Es importante hacer todo seguimiento en positivo, resaltar los avances, encontrar las habilidades que requieren trabajo, sin que esto represente un alimento a las inseguridades.
“Nadie es perfecto, y mucho menos al hablar una segunda lengua. Lo verdaderamente importante es lanzarse a esas conversaciones buscando siempre la claridad de ideas y corroborar con los interlocutores que los mensajes van quedando claros”, señala Anel Viveros, cofundadora del training center mexicano.
4. Practica con regularidad: la constancia es clave. Dedicar tiempo diariamente a mejorar tu inglés, ya sea mediante lectura, conversación o ejercicios prácticos marcará la diferencia en el conocimiento y en la seguridad con la que te comunicas.
“Los idiomas son como el ejercicio, se tiene que practicar para mantenerse en forma, para recordar estructuras, vocabulario y sobre todo para mantener la fluidez en las conversaciones”, indica Bulas.
5. Acepta la imperfección: todos cometen errores al aprender un nuevo idioma. Aceptar los tropiezos y aprender de ellos es esencial para seguir avanzando en el desenvolvimiento de un segundo idioma. La claridad de ideas en las conversaciones es importante para la comunicación efectiva.
Fomentar un ambiente colaborativo en espacios de capacitación resulta esencial para contrarrestar el síndrome del impostor entre los colaboradores de una empresa. Al compartir experiencias y conocimientos en equipo se crea un sentido de comunidad donde cada miembro se siente valorado y comprendido. Este intercambio promueve la normalización de desafíos y errores, disipando la sensación de inseguridad. Finalmente, la retroalimentación positiva y el apoyo mutuo refuerzan la confianza individual, permitiendo a los colaboradores reconocer sus habilidades y contribuciones de manera más objetiva. Así, el trabajo en equipo en entornos de capacitación se convierte en una herramienta poderosa contra el síndrome del impostor y el auto sabotaje.