Llega la nueva era de la estética corporal.

Por Revista ES

La criolipólisis, un innovador tratamiento conocido popularmente como el “congelamiento de grasa”, se está consolidando como la solución ideal para quienes buscan esculpir su figura y eliminar depósitos de grasa persistentes sin necesidad de procedimientos quirúrgicos.

Esta tecnología no invasiva, segura y efectiva, ofrece una alternativa prometedora para combatir la grasa localizada que a menudo no desaparece con dieta o ejercicio.

Además de los beneficios estéticos, es importante destacar que la grasa localizada, especialmente la que se acumula en el abdomen, no es solo una preocupación de apariencia. Esta grasa se ha relacionado con un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2 y otros problemas de salud. Por lo tanto, abordar estas áreas de grasa persistente puede tener un impacto positivo tanto en la silueta como en la salud general.

Roberto Elizondo de Tabush Dermatología explica que “es un tratamiento no invasivo que congela las células grasas para que se eliminen de manera natural y sin tiempo de recuperación. Lo que la persona puede esperar es una reducción de grasa en zonas específicas con resultados visibles en una sola sesión”.

“Estamos orgullosos de ofrecer una tecnología que permite a nuestros pacientes alcanzar sus metas estéticas de manera segura y eficaz, brindándoles la confianza que merecen sin tener que pasar por un quirófano”, agregó Elizondo.

¿Cómo funciona?

El funcionamiento de la criolipólisis es notablemente preciso. Utiliza un proceso de enfriamiento controlado para atacar y congelar las células grasas subcutáneas. Al cristalizarse, estas células se vuelven inservibles y son eliminadas de manera natural por el cuerpo en las semanas siguientes al tratamiento.

Lo que hace tan atractiva a esta técnica es que el proceso solo afecta las células de grasa, dejando intactos los tejidos circundantes. Los resultados son visibles en una sola sesión, con una reducción de hasta el 40% de la grasa en el área tratada, lo que se traduce en una notable mejora de la silueta.

Las áreas que normalmente se aplican con este procedimiento son el abdomen, los flancos, la espalda, los muslos o la papada. Se recomienda para adultos de 18 años en adelante que gozan de buena salud y con expectativas realistas acerca de los resultados.

¿Qué esperar después del tratamiento?

Tras una sesión de criolipólisis, los pacientes pueden retomar sus actividades cotidianas de inmediato, ya que no requiere tiempo de recuperación. En los días posteriores, es normal

experimentar un leve enrojecimiento, sensación de hormigueo o adormecimiento en el área tratada, efectos que desaparecen en poco tiempo.

Los resultados comienzan a ser visibles a partir de la tercera semana y se consolidan progresivamente durante los siguientes dos a tres meses, a medida que el cuerpo elimina de manera natural las células grasas cristalizadas.

Ventajas principales de la criolipólisis

• Procedimiento no invasivo y sin cirugía.

• Resultados duraderos al mantener hábitos saludables.

• Reducción localizada de grasa en áreas difíciles de trabajar.

• Sin cicatrices ni necesidad de reposo.

¿Quiénes son candidatos ideales?

• Personas con grasa localizada que no desaparece con dieta ni ejercicio.

• Adultos en buen estado de salud.

• Aquellos que desean definir su silueta sin recurrir a procedimientos quirúrgicos.

Recomendaciones para mejores resultados

El éxito del tratamiento depende también de acompañarlo con una alimentación equilibrada, hidratación adecuada y ejercicio regular. En algunos casos, se puede complementar con otros procedimientos como drenaje linfático y ondas de choque para optimizar los resultados.

Finalmente, Elizondo agrega: “es fundamental entender que este no es un método para perder peso, sino una herramienta para la remodelación corporal, ofreciendo una solución no invasiva y sin tiempo de recuperación”.