Por: La Vanguardia
En el año 2050 la población latinoamericana superará, en más de un 50 por ciento, los 50 años de edad”. De esa premisa, avalada por la OMS, parte Eric Larue especialista de Sanofi, la compañía farmacéutica francesa que en los últimos cinco años ha mirado hacia los suplementos alimenticios, o lo que ellos denominan la “nutrición avanzada”.
En esa línea y, de manera oficial, lanzaron en la ciudad de Heidelberg (Alemania) su más reciente producto: el Gelicart, el cual promete cuidar y extender la vida del cartílago; y de esa manera “mejorar la movilidad de las personas”, dice el especialista y hace referencia a la importancia que este producto tiene para los deportistas de alto rendimiento, y para las personas en general en la medida en que será un apoyo para el cuidado de las articulaciones.
“En América estamos en un proceso de envejecimiento. En los próximos años cuatro de personas de cada diez superarán los 50 años de edad; es decir, la población de México y Brasil juntos diseminada por toda América Latina.
“Lo peor para una persona mayor es sentirse dependiente de sus familiares”, dice Liduina Florini, gerente científica de la compañía francesa, quien hace hincapié en la diferencia entre comer y nutrirse. “El desequilibrio nutricional genera problemas, pero de eso no son conscientes muchas personas”, señala esta brasilera de ascendencia holandesa para quien las escusas para no alimentarse de manera adecuada son las largas jornadas de trabajo, tras las cuales se busca una recompensa que por lo general se traduce en comer lo que se antoja, por lo general mucha grasa y mucha harina.
“Es necesario hacer un cambio en la manera como nos alimentamos”, dice Florini. En ese sentido enfatiza que cada día el ser humano produce 200 millones de células, las cuales reflejan lo que se consume, siendo las consecuencias en el ser humano un reflejo similar. Es necesario pensar si sólo se come por placer y en abundancia, o si se hace pensando en la salud. “La globalización ha traído muchos problemas frente al comer de manera adecuada. El problema no son las hamburguesas, son las decisiones que cada quien toma, y más que ellos es si adoptamos este tipo de comida como lo que va a marcar el objetivo nutricional”, dice esta bióloga.
A LA HORA DE COMER
“Comer es sagrado”, dice Liduina Florini y hace referencia a la atención que debe darse al alimentarse momentos como el desayuno, el almuerzo o la cena, momentos en los que usualmente la comida se acompaña con distractores como la televisión. Es necesario que cada sistema se dedique a sus funciones particulares “yo soy lo que como”, agrega.
El ritmo de vida, la presión social, la falta de interés por invertir en la salud, el estrés, la ansiedad, o la falta de dinero son algunas de las razones en las que muchas personas sustentan su manera de comer, generando problemas por los desórdenes y la inadecuada nutrición.
“Más del 75 por ciento de los pacientes que llegan a los hospitales presentan desviaciones nutricionales”, dice la especialista recordando a la Organización Mundial de la Salud (OMS) y prende las alarmas frente a lo que empezara a suceder en apenas cinco años. “En 2020 las líneas de vida de los mayores de 65 años y los menores de edad se cruzarán; en los primeros para incrementarse; y en los segundos, para disminuir”, agrega Florini en un claro llamado de atención para cuidar lo que las personas consumen con la mira puesta en la manera en que cada quien quiere vivir sus años mayores.
“Hace algunas décadas, o muy lejanas, llegar a los 30 y 35 años de edad se consideraba vieja a una persona. Hoy la expectativa de vida se acerca a los 100 años, por lo que la pregunta es ¿cómo se quiere llegar a esta edad?”, dice Florini.
En este entorno es que los especialistas han identificado lo que se ha denominado como el “hambre oculta” término con el que identifican los antojos que se presentan en muchas personas, quienes sin percatarse presentan problemas por ausencia de vitaminas que el cuerpo reclama. “La ausencia de vitamina C genera problemas en las encías, la de Selenio genera depresión, y la falta de ácido fólico, repercute en el insomnio”. Estas son algunas de las señas que se presentan en las personas de una manera silenciosa. Esta una de las razones por las que es necesario cuestionar la rutina alimenticia.
¿Usted domina lo que come, o lo que come lo domina? Es pregunta que está sobre la mesa a la hora de decidir cómo debe ser la alimentación.
LA SOLUCIÓN
La respuesta al qué hacer la da la llamada ‘pirámide nutricional’, es decir, el ingerir de todos los grupos nutricionales, comer alimentos de distintos colores, tomarse un buen tiempo para masticar bien y a esto sumar ejercicio, es la salida para genera un cambio en la vida.
“Si las personas cambian las excusas, se toman su tiempo para masticar adecuadamente, si se concentran en la comida que están consumiendo, si comen alimentos nutritivos y cambian el ascensor por las escaleras, es la fórmula”, señala Liduina Florini.
Ante los problemas que genera el mal comer, y ante los vacíos que se presentan por este hecho, muchos son los complejos alimenticios que están en el mercado; y es a ese escenario al que llega Sanofi con Gelicart, un producto derivado de la piel de los cerdos y que es transformado en la industria farmacéutica dándole valor científico especial, con ciencia y tecnología (14 estudios científicos) para contribuir a la llamada ‘Nutrición avanzada’, entendida como la posibilidad de tener los ingredientes nutricionales funcionales de eficacia comprobada en concentraciones adecuadas.
Esta es una manera sencilla de recuperar o regenerar el cartílago, mejorando los problemas en las articulaciones y -dice Sanofi- disminuyendo el dolor; y agrega que no tiene contraindicaciones, pues no es un medicamento, ni genera efectos secundarios.