Por: Vida y Salud
Cuando nace tu bebé, también nacen infinidad de preguntas. Una de ellas puede estar relacionada con el baño. ¿Cuándo lo debes bañar? ¿Con qué frecuencia? ¿Cuál es la mejor forma de hacerlo? No te pierdas esta nota para que sepas lo que debes tener en cuenta a la hora de bañar a tu bebé recién nacido.
Los recién nacidos son tan frágiles, que sólo dan ganas de acariciarlos. Su cuerpito pequeño, su cabecita, sus manitas y sus pies parecen de azúcar. Por eso, si te estás estrenando como madre o padre, la hora del baño puede traerte muchas preguntas y temores acerca de cómo manejar a tu bebé para no causarle ningún daño y darle el mejor cuidado a su delicada piel.
Para que la experiencia del baño de tu bebé recién nacido no te intimide y sea más emocionante, es necesario que te informes. Me imagino que ya te habrán dado muchos consejos o incluso, quizá hasta te habrán regalado una canasta llena de productos para la limpieza y el cuidado de su piel. Es probable que haya tantas opciones, que no sepas cuál es la mejor.
A continuación te doy algunas recomendaciones para el baño de tu recién nacido:
¿Cómo puedes saber cuándo darle su primer baño a tu bebé?
Los recién nacidos están listos para su primer baño cuando su temperatura corporal (de su cuerpo) y el funcionamiento cardio-respiratorio (del corazón y los pulmones) se haya estabilizado. Esto sucede alrededor de 6 horas después de nacer.
¿Con qué frecuencia lo debes bañar?
No es necesario bañar a tu recién nacido todos los días. Se recomienda que lo bañes día por medio, eso es suficiente para mantener su piel limpia. Los días que no lo bañes, puedes pasarle una toallita húmeda por su cara, su cuello, sus axilas, y otros pliegues de su cuerpo, así como su colita y sus genitales.
A la hora del baño, ¿Se recomienda sumergir su cuerpo entero o no?
La mejor forma de bañar a tu recién nacido es sumergiendo su cuerpo entero, excepto por el cuello y la cabeza para que se mantenga calientito. Para esto sólo necesitas llenar su bañera con un poquito de agua tibia y sostenerle bien su cabecita. La temperatura a la cual debe estar el agua no debe exceder los 120 grados Fahrenheit (48 grados centígrados).
¿Debes usar productos como jabones o champú?
No es necesario. Bañar a tu bebé recién nacido con agua únicamente es ideal. Si decides usar productos, debes seleccionar aquellos que sean suaves, con un pH neutro (el pH determina el grado de acidez), sin fragancias ni colores. Usando sólo una pequeña cantidad, eso es más que suficiente y debes asegurarte de enjuagarlos bien. Esto se debe a que la piel de los bebés recién nacidos es muy propensa a irritarse y a sufrir de infecciones.
Finalmente, recuerda debes cambiar los pañales cada dos a cuatro horas o inmediatamente si está mojado o sucio. Se recomienda limpiar esa área con agua y una toallita suave. Si decides usar pañitos, elige los que sean sin alcohol para no irritar la delicada piel de la zona genital y su colita.
Ahora que ya sabes qué hacer y cómo, se te irá pasando la ansiedad de esos primeros días con el bebé, en que todo es nuevo. Poco a poco te irás convirtiendo en toda(o) una experta y esos momentos del baño serán una manera más del contacto y la diversión entre tú y el nuevo miembro de la familia.