Buenos hábitos alimenticios y un estilo de vida saludable son claves para prevenir esta condición de salud.

Por ES / Fuente de información: Asociación Panameña de Nutricionistas y Dietistas.

La acumulación anormal o excesiva de grasa en el cuerpo, es la que define el nivel de sobrepeso u obesidad en una persona. En nuestro país, 1.8 millones de personas presentan esta condición de salud; se estima que la principal causa son los malos hábitos alimenticios y el sedentarismo.

De acuerdo con los resultados del último censo de salud, realizado por el Ministerio de Salud (MINSA) y la Caja de Seguro Social (CSS), el 45% de la población panameña es obesa. Los lugares que presentan una mayor incidencia de esta condición de salud son Colón, Panamá Norte y Chiriquí.

Según la nutricionista Myrna Mencomo, presidenta de la Asociación Panameña de Nutricionistas y Dietistas, urge realizar un cambio en el estilo de vida. Para lograrlo, se necesita impulsar una alimentación balanceada que incluya el consumo de suficiente agua, frutas y verduras; además de opciones saludables en los diferentes tiempos de alimentación -incluyendo las meriendas-.

Los índices de masa corporal elevados, representan un factor de riesgo de otras enfermedades, entre ellas, las cardiopatías, los accidentes cerebrovasculares, diabetes tipo 2 y cáncer (mama, ovarios, próstata, hígado, colon, entre otros).

En Panamá, el 35,74% de las personas sufre hipertensión arterial, el 13,18% tiene diabetes tipo 2 y un 38,39% presenta colesterol elevado. Estos números irán en aumento, si no se toman las medidas necesarias para impulsar un estilo de vida saludable. “Afortunadamente, las autoridades del país y otras organizaciones no gubernamentales, hemos tomado acciones para controlar los indicadores de salud, por ejemplo, la propuesta de ley que busca implementar impuestos a bebidas azucaradas, nos ayudará a sensibilizar a la población acerca del problema que estamos viviendo”, comentó la nutricionista Mencomo.

La totalidad de las recaudaciones del Impuesto Selectivo al Consumo de Bebidas Azucaradas, serán asignadas al Ministerio de Salud, específicamente, al Instituto Oncológico Nacional (ION) y también, para el establecimiento de clínicas especializadas en la atención de pacientes con diabetes.

Para evitar que esta situación continúe en Panamá, debemos fomentar buenos hábitos de alimentación en nuestros hogares. “Lo más importante que deben hacer los padres de familia, es promover una alimentación saludable en los niños y adolescentes -desde que son muy pequeños-, además de motivarlos a realizar algún tipo de ejercicio físico y evitar el uso de los dispositivos electrónicos”, señaló Mencomo.

Urge un estilo de vida saludable

Anteriormente, el sobrepeso y la obesidad se consideraban un problema propio de los países de ingresos altos, sin embargo, hoy en día ambos trastornos aumentan en los países de ingresos bajos y medianos, en particular en los entornos urbanos.

Dada esta situación la nutricionista aconseja disminuir la cantidad de jugos o néctares con grandes cantidades de azúcar e ingerir más cantidad de agua. “El consumidor debe aprender a leer las etiquetas de las bebidas que consume y conocer las consecuencias si lo hace en exceso”, concretó Mencomo.

Algunos ejemplos del contenido de azúcar presentes en las bebidas:

Tipo de bebida Presentación Cantidad de azúcar

Gaseosa 48 oz 128 gramos
Bebida energética 15 oz 54 gramos
Vaso de leche 8 oz 12 gramos
Botella de agua 16 oz 0 gramos

Según un estudio realizado por el Consejo de Cáncer Victoria, en los Estados Unidos y la Universidad de Melbourne en Australia, las personas que consumen con regularidad bebidas con altos contenidos de azúcar, corren más riesgo de desarrollar cáncer.

En América Latina, el cáncer es la segunda causa de muerte. En nuestro país, el Instituto Oncológico Nacional (ION), registra 3.367 nuevos casos de cáncer referidos a ese hospital, anualmente.

La educación del consumidor panameño acerca de un estilo de vida saludable y buenos hábitos alimenticios es indispensable en la actualidad. “La obesidad se puede prevenir a través de diferentes esfuerzos, entre ellos, promover iniciativas que regulen el consumo de estas bebidas en el país”, enfatizó la nutricionista.