Comer almendras en vez de snacks típicos (como papas, galletas y pan) es benéfico para nuestra salud cardíaca.
Por EFE
El consumo habitual de almendras aporta una serie de beneficios en la prevención de enfermedades cardiovasculares y disminuye los niveles de colesterol, según varios estudios difundidos este miércoles con motivo del Día Mundial de la Almendra.
Comer almendras como snack mejoró la función endotelial, que es un indicador clave de salud vascular y disminuyó el colesterol LDL o «malo», según el estudio de investigación de la Tufts University financiado por la organización Almond Board of California.
En el estudio de 6 semanas, los participantes (que presentaban riesgo de enfermedad cardiovascular superior al promedio) consumieron almendras o un snack control con la misma cantidad de calorías que representaba el 20 % de las necesidades energéticas diarias estimadas de cada participante.
El equipo de investigación después comparó los marcadores de salud cardiometabólica entre los dos grupos y encontraron que el grupo que comió almendras, en comparación con el grupo control, presentó una mayor vasodilatación dependiente del endotelio por incremento de unidades del 4% (medido mediante dilatación mediada por flujo o DMF), que es un fuerte predictor de inicio y progreso de aterosclerosis.
Una mejor DMF significa que las arterias se pueden dilatar más fácilmente en respuesta a un mayor flujo sanguíneo, que es un fuerte indicador de salud cardiovascular, según el comunicado de la Almond Board of California difundido este miércoles.
Los niveles de colesterol LDL disminuyeron en el grupo de almendras en comparación con el grupo Control. No hubo diferencia entre ambos grupos en grasa hepática y otros indicadores bioquímicos (triglicéridos, colesterol HDL, glucosa, insulina y otras).
«Comer almendras en vez de snacks típicos (como papas, galletas y pan) es benéfico para nuestra salud cardíaca, ya que reduce los niveles de colesterol LDL malo y mejora la salud de nuestras arterias», explicó la doctora Wendy Hall, catedrática de Ciencias Nutricionales en King’s College London.
«Con base en datos existentes sobre el riesgo de padecer enfermedad cardiovascular, predecimos que reemplazar snacks típicos por almendras a largo plazo resultaría en una reducción del 30 % en el riesgo relativo ajustado de un evento cardiovascular», agregó la doctora Hall, quien participó en el estudio de investigación.
El snack ideal contiene tres nutrientes clave: fibra, proteína y grasa saludable que mantienen una satisfacción durante más tiempo y estabilizan los niveles de azúcar sanguínea, ayudando a combatir los antojos.
Consumir pequeños snacks saludables entre comidas contribuye a mantener al cuerpo trabajando a su máximo potencial además de que pueden beneficiar a tu salud.