Para el año 2030 el 16.6% de la población de América Latina y el Caribe tendrá 60 años o más.

Por Revista ES

En tan solo siete años, una de cada seis personas en el mundo tendrá 60 años o más, llegando a un total de 1.400 millones de personas adultas mayores. En el caso de América Latina y el Caribe, para el 2030 más del 16.6% de la población superará esta edad, según datos de la Organización Panamericana de la Salud
(OPS).

Estas cifras solo aumentarán con el paso de los años tal como indican proyecciones de organismos internacionales. Es por esto que, ante un panorama de envejecimiento de la población y en el marco del Día Mundial de la Ancianidad, la Federación Centroamericana y del Caribe de Laboratorios Farmacéuticos (Fedefarma), realiza un llamado a la concientización de las necesidades de atención sanitaria de la población adulta mayor con el objetivo fomentar políticas públicas, programas y legislaciones que protejan la vejez.

De acuerdo con la OPS, más del 74% de las causas de muerte en adultos mayores en el año 2019 fueron evitables; es decir, de haberse aplicado oportunamente las correctas medidas de prevención y tratamiento, las cifras serían otras. Entre las principales razones de esta situación, se encuentra la falta de acceso a los servicios de salud debido a las limitaciones económicas, geográficas y de calidad de la atención sanitaria.

Además, el proceso de envejecimiento representa en sí mismo un reto de atención para los sistemas de salud, al requerir un tratamiento especializado para causas complejas relacionadas al deterioro en esta población, tales como: padecimientos relacionados al Alzheimer, demencias y caídas.

Para Victoria Brenes, Directora Ejecutiva de Fedefarma, es necesario invertir en la salud de las personas adultas mayores. “El estado saludable de esta población beneficia el desarrollo de las familias y comunidades de la región; por esta razón debemos utilizar el conocimiento disponible para fomentar la creación de políticas públicas, programas y planes estratégicos orientados a crear un modelo coordinado de servicios de salud que aumenten la calidad y esperanza de vida de los adultos mayores”.

Además, otro eje importante señalado por Fedefarma, es que acompañado de un mayor acceso a los servicios de salud, debe haber un esfuerzo coordinado para educar a los profesionales de la salud a cargo de su supervisión médica, familiares y red de apoyo sobre los cuidados que deben procurar los adultos mayores.

Por esta razón, se deben repasar las principales actividades que fomentan la prevención de enfermedades durante la etapa de la vejez. Estas son:

• La prevalencia del ejercicio físico y la alimentación saludable. Con el objetivo de reducir el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, hipertensión arterial, obesidad, osteoporosis, y algunas demencias, entre otros padecimientos.
• La correcta toma de medicamentos. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) si bien el 90% de los adultos mayores toman al menos 1 medicamento recetado, más del 50% de esta población no toma sus medicamentos de manera adecuada. Por esta razón, se recomienda elaborar una lista detallada de los fármacos a tomar, con su respectiva hora, indicaciones del médico a cargo y cualquier información adicional pertinente.
• El control clínico. Existen enfermedades tales como la diabetes, hipertensión y colesterol alto que no suelen brindar síntomas antes de ser detectadas, por lo que es vital un control periódico.
• La vacunación. Las vacunas antigripales, antineumocócicas y del tétano reducen la posibilidad de complicaciones por enfermedades y padecimientos comunes.

Para Fedefarma, los esfuerzos conjuntos en las áreas de promoción de un acceso a servicios de salud y educación de calidad son fundamentales para garantizar una vejez digna, saludable y con una mayor esperanza de vida en Centroamérica y el Caribe.