La doctora forouhi advierte que es peligroso afirmar esto partiendo de la evidencia de su estudio.
«No podemos asumir que los efectos beneficiosos de los lácteos provienen solamente de los ácidos grasos saturados. Después de todo, los alimentos tienen una combinación de ingredientes».
Señaló que hay un vínculo fuerte entre la mantequilla y la grasa saturada y el colesterol malo. Por ello, se requieren de otros estudios mas específicos sobre distintos tipos de grasas saturadas.
Y especialmente en relación a la mantequilla, ya que según dice, la mayoría de los estudios científicos no la incluyen en la definición de lácteos.
Esta investigación puede cambiar dramáticamente nuestro conocimiento de las grasas, o puede que no lleve a nada.
«Es demasiado pronto para darle al público la impresión de que está libre de comerla sin riesgo sobre la base de este estudio preliminar, que es interesante, pero no definitivo».