Las dietas de moda sin el acompañamiento adecuado de un profesional de la salud pueden causar problemas metabólicos y óseos a largo plazo, afectando el estado físico en forma permanente.
Por Revista ES
En la población adulta de Costa Rica, los estudios muestran que más del 60% tiene sobrepeso u obesidad, con un incremento marcado en mujeres mayores de 45 años. Sin embargo, en un mundo donde la balanza a menudo define nuestra percepción de la salud y el bienestar, es fundamental cambiar el enfoque hacia la calidad de la pérdida de peso y el impacto que esta tiene en la salud presente y futura.
La mejora del peso va más allá de los kilos perdidos, porque también es clave considerar la preservación de la masa muscular, la mejora de la composición corporal y la calidad del tejido graso. Además de los riesgos inmediatos asociados con la obesidad, como hipertensión, diabetes tipo 2 y enfermedades cardiovasculares, las consecuencias a largo plazo de una reducción de peso deficiente pueden incluir cambios que dificultan la capacidad para recuperar la salud. Por ejemplo, la pérdida de masa muscular disminuye el metabolismo basal, afectando la capacidad del cuerpo para quemar calorías de manera eficiente. Esta disminución del músculo no solo compromete la forma física, sino que también impacta la función metabólica y la salud ósea.
Las dietas populares, que muchas veces promueven una reducción rápida de peso sin considerar la nutrición adecuada y la salud en general del paciente, están siendo reemplazadas por métodos más equilibrados y saludables. Dentro de estas opciones, una dieta específica cetogénica, rica en proteínas de alta calidad, ha demostrado ser una excelente alternativa para lograr una reducción de peso saludable y duradera.
Según las investigaciones y estudios, en esta opción, acompañada por especialistas en salud se logra retener 95% de músculo por cada kilo bajado, indicó Sergio Pose, médico especialista en metabolismo.
Este tratamiento, en la primera etapa, induce una cetosis fisiológica, al ser baja en carbohidratos y normal en proteína, lo que permite al cuerpo quemar grasa de manera eficiente como fuente primaria de energía. A su vez, el enfoque en proteínas de alta calidad (40% mejores que la mejor proteína de la naturaleza que es la proteína del huevo) asegura la preservación de la masa muscular, sin provocar una sobrecarga renal de proteínas, promoviendo una pérdida de peso más saludable y sostenible. Además, esta dieta contribuye a una mejora en los niveles de glucosa y colesterol, reduciendo así el riesgo de enfermedades metabólicas.
¿Por qué cuidar el músculo?
Una persona que al bajar de peso pierde su músculo tendrá un metabolismo más lento y por ende, mayor dificultad para mantener un peso saludable a largo plazo. Además, los músculos son fundamentales para la función corporal, la fuerza y la movilidad, por lo que su conservación es esencial para mantener una buena calidad de vida.
“Mantener un adecuado porcentaje de músculo no solo mejora la composición corporal, sino que también contribuye a una mayor quema de calorías incluso en reposo, favoreciendo la pérdida de grasa sin comprometer la salud general. Por eso, es vital adoptar un enfoque equilibrado en la pérdida de peso que incluya el acompañamiento de un médico especialista en el manejo de la obesidad, una nutrición adecuada y ejercicios de fuerza. Todo esto asegura la preservación de la masa muscular y contribuye a un bienestar duradero”, afirmó el Dr. Pose.
Encuentre su método ideal para bajar de peso
● Consulte con médicos especialistas en el manejo del sobrepeso y obesidad: Obtenga la orientación y acompañamiento de un médico especializado, esto le permitirá desarrollar un plan personalizado con el método de pérdida de peso que se ajuste a sus necesidades y condiciones de salud.
● Busque un enfoque integral: Elija un método que apunte a la reducción de peso, desde un enfoque en la mejora de la composición corporal y por ende la salud en general.
● Asegúrese de preservar la masa muscular: Es crucial que seleccione estrategias comprobadas para mantener la masa muscular.
● Incorpore ejercicio de fuerza: Añada rutinas de ejercicio tónico que favorezcan la formación y preservación muscular.
● Establecer hábitos a largo plazo: contar con un acompañamiento especializado, que fomente hábitos sostenibles que busquen reducir peso y aumentar el bienestar de manera duradera. Considere su rutina, disponibilidad de tiempo y gustos personales para adquirir hábitos que pueda sostener a largo plazo.
En Costa Rica la obesidad es una enfermedad crónica:
Recientemente, Costa Rica dio un paso importante en la lucha contra la obesidad al declararla oficialmente como una enfermedad crónica de importancia para la salud pública bajo el Decreto Ejecutivo Nº 44780-S. Esta medida subraya la necesidad de abordar la obesidad desde una perspectiva integral, promoviendo hábitos saludables, el acceso a servicios médicos adecuados y la concienciación sobre los impactos a largo plazo que tiene esta condición en la salud de las personas.
La declaratoria responde al marcado aumento de la prevalencia del sobrepeso y la obesidad en todas las edades en Costa Rica, constituyéndose en un problema de salud pública:
● 34.6% de los adultos costarricenses padecen de obesidad. (Fuente: INEC)
● La diabetes tipo 2 es la tercera causa de muerte en Costa Rica, y se asocia principalmente con hábitos alimenticios deficientes y falta de actividad física. (Fuente: Ministerio de Salud de Costa Rica)
● 23.4% de los costarricenses presentan sobrepeso, un factor de riesgo para enfermedades cardiovasculares y metabólicas. (Fuente: Ministerio de Salud de Costa Rica)
● 31.7% de los niños y adolescentes de 5 a 19 años en el país presentan sobrepeso u obesidad, lo que coloca a Costa Rica con una de las tasas más altas en la región de América Central. (Fuente: UNICEF)